Afortunadamente el evento comenzó relativamente temprano para lo que se acostumbra en golden bar (23:40 en comparación a pasadas las 0:00 hrs, mala costumbre adquirida por el público que a la larga solo aletarga los eventos y entre más tarde, menos objetividad para apreciar las bandas ) y lo que seguía a continuación fue el punto alto de la noche: Dekapited
«Sin misericordia» es el reciente LP que venían presentando en Rancagua y su show fue el claro reflejo del título de su más reciente producción. Aquí el thrash que ejecutan rebasó las cotas de intensidad y se vió reflejada en el público asistente que no paró de entregarse al mosh y la potencia entregada. Sabido es que el thrash es un estilo muy nostálgico y vaya que se notó en su frontman que en momentos evocaba el espíritu de un joven Max Cavalera en la era Beneath the remains, pero lejos de ser un mero alcance visual, la propuesta de dekapited goza de voz propia, temas como «aniquilación total» y «mundo decadente» son demostraciones claras del amplio dominio que maneja el cuarteto sobre el escenario y supo mantener atenta y comprometida a la audiencia durante todo su set.
Ya para el cierre (en lo personal deberían haber tocado al medio) Dezaztre Natural serían los encargados de cerrar esta potente fecha a la cual satisfactoriamente asistió una cantidad considerable de público y estuvo comprometida con la causa hasta el final. La propuesta de Dezaztre natural respira un aura más callejera y combativa por llamarlo de alguna forma. Letras cargadas de contenido social son las arengas vociferadas por sus dos vocalistas, quienes le daban un plus a su presencia escénica, sin quedarse atrás el resto de los integrantes (batería, bajo y guitarra respectivamente) mantuvieron la energía a tope hasta altas horas de la noche en el local.
Ojalá presenciar más fechas de este nivel, donde se nota hasta el mínimo detalle cuidado y con una audiencia receptiva y que no solo asiste por el copete y el carrete en la terraza del local.