El hardcore es un estilo de música que nace y renace, primeramente desde el punk, y luego agregando estilos como el midwest emo y el screamo, o llegando hasta toques ambientales y electrónicos.
El festival TODOS NUESTROS MAÑANAS TERMINAN HOY, que se efectuó en su quinta edición este pasado 21 y 22 de diciembre, debe ser en efecto una instancia primordial para el post-hardcore y el emo nacional.
Es un festival organizado por el colectivo del mismo nombre, Todos Nuestros Mañanas Terminan Hoy, que es formado por integrantes de Cienfuegos, y que apuestan por alimentar esta escena, que si bien es relativamente under, se ve en crecimiento constante.
El festival comenzó el sábado 21, con una impresión a primera vista muy buena, equipos de calidad, un espacio genial como lo es Cajacústica, y todo el ánimo de empezar con la música.
Luego se sube al escenario Alexitimia, una banda de Screamo/Skramz que se nota joven, pero que en su entrega fuerte y emotiva, sus voces desgarradoras, sus letras potentes y spoken word clarísimo, logran inaugurar explosivamente este festival.
Luego vino Autodefensa, con una propuesta un poco más ambiental, con toques a math rock y hasta medio shoegaze, pero aún muy intenso, con voces muy agresivas y desgarradoras pero bien ejecutadas. Además, venían muy bien preparados con un sistema de pistas sincronizado con luces.
La tercera banda en tocar fue Sunkel, banda penquista derechamente hardcore, con muy poca a nula ambientalidad, pero con mucha más agresión y más incitante a moshear.
Quiebra impecablemente la racha de intensidad emocional de las bandas anteriores con una propuesta mucho más fuerte, con claras raíces punk, pero siempre muy hardcore.
Después de Sunkel se presentó Conjunto Vacío, banda de San Carlos.
Esta banda, al igual que la anterior, sigue con la intensidad que ofrece el hardcore puro y duro, pero esta vez si está combinado con esta intensidad emocional que ofrecieron las dos primeras bandas, en su composición y escritura.
Prontamente vino Cuando el problema no existe, banda de tomé y conce.
Su música tiene orígenes muy claros en el midwest emo y el screamo, con letras fuertes y emotivas pero con esa armonía mucho más “positiva” que caracteriza al midwest en general. Al público le gustó mucho, coreaban los temas mientras mosheaban, había mucha energía.
Después se presentó Cienfuegos.
Entregan, como siempre, una música muy cargada de emociones y agresión y gritos contrastantes entre sí, que dan vida a las variables dinámicas entre secciones. El post-hardcore melódico y ambiental que los caracteriza genera una energía casi de trance entre el público. Un dolor que se puede sentir a flor de piel.
Lo ultimo de la jornada fue un versus de 1000 ánimas con Niño Symbol Ohhh!
Esta instancia fue de una intensidad total de inicio a fin, la velocidad y fuerza de ambas bandas choca y colapsa en una tocada que exige tanto de los músicos como del público, que no para de moshear y cantar los temas.
Al comenzar el día domingo 22 de diciembre, segundo día del festival, se presenta una de las bandas mas distintas del festival, Matar a GraX, con una propuesta fresca, nueva y caóticamente energética, lo que incentiva al público a disfrutar nuevamente, descansado del sabado. Esta banda tiene mucho del Math Rock, tomando prestado algo de screamo, y con sus mosh con peluches volando y su música en algún grado infantil, te invita a conectar fuertemente con tu niño interior. Algo para volver a experimentar.
De segunda banda del día viene NKOMS, banda que tiene una notoria mezcla de géneros, pero primordialmente sonando entre hardcore y screamo. Sus letras emocionalmente cargadas son entregadas a través de gritos agresivos y escalofriantes que aseguran haber sufrido así.
Como tercera oferta del line up se presenta el abismo en mí, con una música que refleja muy bien su nombre, canalizando un vacío interior de la manera más arrolladora posible.
Sus letras se dirigen mayormente a las emociones oscuras que nos rodean a veces, y se confirma con su música cargada de sentimientos que son liberados.
Luego, viene El último ardid. He de transparentar que es de mis bandas favoritas del fichaje. Entregan un post-hardcore muy potente, con música muy intensa emocionalmente y muy consciente del ambiente y la sonoridad que abarca, que a su vez se lleva muy bien con el canto que tiene, con letras desgarradoras y gritos muy auténticos y con mucho dolor por detrás.
La quinta banda pasaba por su última vez en escenario, y era Baudelaire.
Este show muy especial tuvo una energía inigualable, ya que la pena y el duelo de lo que es finalmente un “funeral”, se traduce directamente a lo emotivo de sus canciones, sus voces y energía, empujada por el adiós. Gracias Baudelaire.
La penúltima banda de este festival fue Confío en tus amigos, de Valparaíso.
Una banda con trayectoria, y con música un tanto punk y rockera, medio garage rock, pero sigue haciendo acordar a grandes del hardcore punk, del corte de D.R.I.
Con guitarras potentes, y batería y bajo sólidos, su sonido está muy consolidado.
Una banda muy disfrutable y mosheable, y el público no defraudó en eso último.
Finalmente, para cerrar este festival, se presenta Mi sueños son de tu adiós, de Argentina.
Un sonido claramente muy screamo, se transparentan muy notablemente sus orígenes midwest. Música fuerte y rápida, que llama al público a pasarlo bien, cantar, moshear y surfear. Una energía muy fuerte sabiendo que es el final de este festival de dos días.
Durante ambos días de este festival, me sentí muy a gusto con cada una de las bandas que se presentaron. La organización hizo un excelente trabajo, tanto en la increíble curatoría de las bandas asistentes como el enfoque claro en que la gente pueda disfrutar simplemente. Muchas bandas relacionadas al estilo, hardcore y subgéneros, muchas de ellas exponentes en la escena nacional, y se fomenta constantemente el crecer de esta escena, que podría ser considerada “under” pero que está en un excelente momento.
A lo largo de los dos días se generó un ambiente de fraternidad entre el público, ya que las canciones muchas veces son de temáticas fuertes y suelen atacar la emoción, y eso muchas veces puede vulnerabilizar al escucha, pero en esta fraternidad se haya un espacio seguro para poder ser vulnerable colectivamente, que es algo que seguramente muchos de (si no todos) lxs asistentes agradeció con el corazón en la mano.
Habiendo vivido una excelente experiencia y gestión, lxs invito al próximo TNMTH, que sería su sexta edición. A disfrutar de lo que seguramente serán bandas relacionadas al hardcore de muy buena calidad, y un ambiente inigualable.
Nota y fotos por: Vicente Poblete (@bishop_works) para @feral_cl y @epifaniasubterranea